Saludos Jóvenes empresarios!
Hoy quiero hablarles sobre un paso fundamental a la hora de
hacer un negocio, parece el más fácil pero es donde se quedan estancadas la
mayoría de las personas, se trata de ponerse un objetivo y elaborar un plan.
La mayoría piensan que lo más importante es tener una idea
de un millón de dólares (y sorpresivamente muchas personas la tienen) pero
personas con grandes ideas terminan discutiéndola mucho con sus amigos y
familiares, y a la hora del té no terminan con nada, esto es porque no tienen
una motivación clara.
Tras leer “Human behaviour in business” de G. Hugh Russell,
queda muy claro que el ser humano es una poderosa máquina para llevar a cabo
tareas y objetivos muy difíciles, sin embargo tiene una paradoja motivacional;
Tiene la capacidad de entender la realidad muy bien, pero también tiene la
capacidad de ignorar la realidad y de engañarse todo lo que necesite. Todas las
personas hacen esto en alguna medida, y esto hace que seamos capaces por ejemplo
de tener una buena idea y ver todo el potencial que tiene detrás, pero luego
sabotearnos lentamente hasta que la idea queda sepultada en el olvido.
Nuestro cerebro saca a relucir una poderosa capacidad
deductiva y una excelente memoria para pensar en un proyecto, y luego ve
incontables problemas y trabas con su ejecución, cuando probablemente si le
pusiera el mismo empeño y la misma motivación que a la inspiración sacaría
adelante un gran número de proyectos en su vida.
Por eso mismo es tan importante tener una motivación más sólida y más detallada. Varios autores concuerdan en que el dinero no es una
buena motivación, la ambición por dinero viene de una mentalidad de escasez, se
ha demostrado que es un buen incentivo para actividades mecánicas que no
demanden capacidades cognitivas (pensar por ejemplo), pero un incentivo nulo o
contrario cuando se requiere razonar y crear , para más información respecto a
este vean este excelente video: http://www.youtube.com/watch?v=u6XAPnuFjJc.
En el video Dan Pink explica cómo las motivaciones que si
funcionan son Autonomía, Maestría y Propósito, la primera refiriéndose a hacer
las cosas de la manera que uno quiere y en los tiempos que uno quiere, la
segunda se trata de lo motivantes que son las actividades donde se puede
mejorar y la tercera de las actividades que persiguen un propósito moral o
retador.
En las próximas entradas hablaré más de como incluir estas
motivaciones a la hora de hacer nuestra propia empresa, por ahora espero que
piensen en todas esas buenas ideas que han tenido para hacer una empresa y por
qué no las han llevado a cabo.
¡Comencemos a hacer dinero!
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